Enviado hace más de un mes por ebugateam
Como sucede con el resto de modelos de la marca británica, el Countryman es un vehículo caprichoso y caro, pues a los 25.000 euros que cuesta la versión analizada Cooper D (hay Volkswagen Tiguan por cifras similares), una de las más equilibradas de la oferta, podemos añadir no menos de 5.000 más a nada que nos decantemos por algunos de los extras ofertados por MINI, entre ellos faros bixenón (son direccionales y salen por algo más de 1.000 euros), climatizador (397 euros), techo solar (972 euros), Bluetooth (416 euros más), alarma (317 euros)... Por no hablar de otros como las llantas de 17 pulgadas, el tapizado de piel (desde 1.428 euros) y todo tipo de gadgets capaces de cristalizar un coche casi único.